31.1.08

LA OLA


Sueño mucho, demasiado. (dormido y despierto). Puedo recordar al menos 5 sueños en la semana. A veces creo que mi mundo onírico es bien fuerte, más de lo normal y puede que sea porque he conocido poca gente que sueñe y/o que recuerde clarmente al despertar.

Sueño en colores con mucha realidad, pero claro a veces me paso de página y empiezo a soñar cosas absurdas, ilógicas.

Tengo un sueño que me acompaña desde la infancia y que a medida que he ido creciendo no ha sufrido grandes alteraciones. La Ola.

De sólo recordar las primeras versiones de mi sueño (a mis 5 ó 6 años de edad) me empieza a dar un poco de vértigo en el estomago... en fin, aqui va:

Voy caminando por la vereda frente a esas casas tan bonitas enmarcadas por los pinos de formas siniestras originadas por el fuerte viento que los esculpe desde que son árboles adolescentes, más allá del hotel abandonado de formas setenteras.

Es un dia de sol: el cielo demasiado azul, extrañamente azul (que no es cielo ni azul), en medio del verano quitasoles de mil colores sobre la arena negra de la extensa y abierta playa de Santo Domingo, el ruido de la gente, las olas y los niños riendo o gritando en medio de la playa.

Siento el olor del mar, la humedad. Camino por la vereda y miro al horizonte: algo se avecina.

Empiezo a ver como a la distancia, muy lejos justo encima del horizonte se comienza a levantar una pequeña Ola. siento miedo, ese miedo estilo "Lovecraft" siempre presente, permanente, inmutable que se alza poderosísimo. Ese miedo que reside desde siempre, esa certeza de maldad.

Y se viene la Ola que avanza veloz, creciendo cada vez más. La gente de la playa ni se inmuta, pareciera que no la ven. La Ola esta cerca y el miedo se convierte en terror. entro en shock. La Ola se alza muy arriba por encima de mi y no me deja ver el cielo: veo sus espumas y algunas algas a donde quiera que mire. Me afirmo de un poste de luz y cierro los ojos: al abrirlos la Ola me está llevando, y entre la sal, el agua y sus corrientes veo que todo el mundo sigue en la playa. La Ola no arrastró pelotas, ni toallas, ni a mas personas: solo me lleva a mi.

Después de ese primer sueño cada vez que soñaba y reconocia algo familiar: la vereda, el dia de sol, el ruido de la gente en la playa, comenzaba a sentir ese pavor otra vez. Trataba de despertar. La Ola otra vez ? Nooo, me niego. No pude zafar jamás de la Ola antes de los 10 años.

A eso de los 13 o 14 la Ola comenzó a aparecer en Santiago. Si, en esta ciudad de cordillera. La Ola venía por mi, ya no importaba si existia lógica o no. Por mucho que traté de arrancar siempre terminaba llevándome, haciéndome despertar entre lágrimas agitadas y con el corazón aturdido.

Habia noches en que me daba miedo dormir de puro pensar que quizás nos encontrariamos de nuevo. Pasados los 20 comencé a hacerme hábil pero no valiente: lograba escapar del alcance de la Ola sin embargo el miedo se mantenía constante. Podia encontrarme en cualquier lugar del mundo pero algo en el aire enrarecido me decia que venia otra vez. La enfrenté incontables veces, pudiendo escapar y asi de a poco la fui venciendo.

Hace mas de 6 años que habia dejado de soñar con la Ola. hasta anoche que la Ola volvio a irrumpir en mis sueños con toda su indomable fuerza desatada en mi contra. Esta vez no fui capaz de enfrentarla y volvio a vencerme como cuando niño. Fue un sueño angustiante y que me lleno de miedo.

Debere volver a hacerme habil y valiente, esta vez para que no me cause daño, sin embargo el miedo permanecera en mi almohada mientras ella siga presente, esperando silenciosa a mostrarse otra vez quizá en formas mas terribles aún.

Busco en Internet una respuesta que pueda dar sentido a este sueño en esta etapa de mi vida y encuentro la siguiente definicion:

"Las olas arrebatadas por la tormenta simbolizan la irrupción impetuosa del inconsciente, de las pulsiones instintivas que pueden desmantelar el navío de la razón. Y, en sueños, este otro aspecto de las olas nos pone en guardia contra graves peligros, seguramente pasionales (amor, odio, venganza, celos…) que pueden hacer naufragar nuestra vida privada, profesional o social."

Por ahora prefiero no emitir comentarios pero creo que esta vez la Ola empieza a tener sentido en mi vida.

29.1.08

DE TI


Quiero escribir de ti que tienes esos ojos extraños donde siempre miro mi reflejo.

Quiero escribir de ti que tienes ese olor en el cuello que me tiene adicto, de ti que hablas como dice mi mamá que hablaba yo a tu edad.

De ti que cuando ando triste me dices: Te Amo, Papá.

De ti no más. Mi Sol, mi estrella, mi Rey en este planeta donde estamos sólo los tres.

De ti, Jorgito, que me haces soñar con un lugar pequeño que sea nuestro espacio.De ti, que como dice mucha gente, te pareces tanto a mi, de ti que me devuelves la sonrisa y alejas de mi la melancolía.

De ti que me dices que los fantasmas existen en el peligro y te despiertas a las 3 de la mañana preguntándome qué comen los hipopotamos.

De ti, Guatoncillo, que dices que soy un Rey sin auto.

De ti, mi niño valiente.Del que cada mañana me dice: vamos, Papá, tú puedes; preparame mi lechecita y mis tostadas con mantequilla y mermelada.

De ti que eres pirata y quieres manejar camiones, motos, tractores, submarinos y aviones.

De ti que te ries a carcajadas con Los Padrinos Magicos y cantas todas sus canciones.

De ti, Jorgito, que te apareces en los sueños de personas que ni te conocen o te conocen poco y siempre estás riendo. Y siempre estás feliz en esos sueños.

De ti, Mi Amor, que cada vez que te pregunto si eres feliz me dices con tono solemne: si Papá, soy feliz.

Que cuando te pregunté cómo sabías que yo era tu Papá, me dijiste que tu sabías no más y me diste un abrazo enorme. O cuando vistes por primera vez a Tribilin y y supistes de inmediato que era un perro, cosa que a mi me tomo años descubrir.

Quiero escribir de ti, porque desde que llegastes a mi vida sólo me has regalado alegría. Y por estos dias no sabes cuanto la necesito.

Eres el motor que cada día me empuja para tratar de ser mejor persona. Y estás a años luz de mi. Y te amo.

27.1.08

DE VUELTA


Después de haber andado mil caminos
después de haber vivido cual gorrión
después de haber jugado a este destino
solamente he aprendido a vivir con más temor

Después de ser gigante a mi manera
después de haber gastado la emoción
después de haber perdido hasta el asombro
me doy cuenta que estoy solo en el medio de un avión

Después de recorrer antiguas fotos, encuentro una postal en su interior
me dice en una frase manuscrita que el amor me necesita, sin pasaje y sin avión

Después de repasar toda mi vida. Queriendo rescatar lo que fui yo
resumo las vivencias de mis días y unas lagrimas me avisan que el amor se me escapo

Después de haber vivido todo sin fronteras
con la esperanza de aprender a ser mejor
vuelvo al principio con la vanidad desecha
y me abraza la simpleza que deje en mi habitación


Un año y dos meses, puede ser toda una vida, y sin embargo solo es un tiempo definido, en este caso y para mí, tiempo definido sin ninguna definición. Me siento aquí como ayer, como hace un año y dos meses y las palabras brotan, siento que he cambiado, siento que en mi alma anida un sentimiento que me dice que el tiempo de la complacencia ya paso, más sin embargo mi yo grita, y lucha por abrirse paso entre la conveniencia de lo debo hacer y lo que siento.

Debo escribir, escribiendo siento mi verdadero yo, este fluye a la superficie, es como si fuera un cetáceo que necesitara el aire para respirar, debo respirar, aquello que llevo dentro debe fluir o dentro, se convierte en veneno que marchita mi alma, que engendra la monotonía de mi ser.

Se que llevo miles de cosas dentro y no alcanzo a entender como un ser libre como fui se ha convertido en este atormentado reo de la realidad, no me cansare en contarlo ni les cansare a ustedes, este es el acto y esta es mi contrición, poco importa ahora los motivos, solo se que existen, y solo me importa remediarlos, escribir es un bálsamo que cura mis heridas, es reverdecer el paisaje de mi interior, es pintar de nuevo la vida con una amalgama nueva de colores, veo a través de mis letras, ellas son mis capítulos, a través de ellas me conozco y sin ellas, se que me engañaría.

He llegado hasta aquí y he descubierto que ya no quiero darme pena, ni darla, no quiero sufrir, más se que no hay remedio, acepto el castigo, pues ya se en que parte de mi vida herré el camino, estoy aquí con mis defectos y mis virtudes y, se que he de seguir adelante, aunque no quiera, aunque no deba.

Hasta hoy, al levantarme cada mañana debía encontrar una excusa para afrontar el día, sin saber que ya la tenia, y la tengo hace seis años, mi hijo, Jorgito. al cual deseo y quiero con locura, ahora, ahora ya no puedo morirme, no puedo permitirme ese lujo, uno se debe a sus errores y los errores de uno se deben a si mismo, la complacencia nunca descubrió ningún horizonte.

Sigo pensado la misma frase que invente cuando era adolescente, “si uno se va no puede arrepentirse nunca de haberse ido”, morir no es una decisión, es una circunstancia y yo no soy circunstancia, no soy un suceso, ni siquiera un sucedido, soy persona, con cátedra, la mía, especial, intransferible y se que ejemplar apara otros, y los que no piensen así, allá ellos, pero no conseguirán afligirme ni un ápice más, Soy Jorge Ravanales y he vuelto.