11.9.08

TAN SOLO SE ODIA LO QUERIDO


Con preocupación me busque en el grupo de Facebook "Yo anduve con un saco de weas". Hay todo tipo de casos terribles, con nombres, apellidos y fotos. Infieles, eyaculadores precoces, golpeadores, tontos. Creo haber sido todas esas cosas alguna vez, pero piadosamente ninguna de mis escasas novias tuvo a bien ponerme en ese saco.

El alivio que sentí primero se convirtió luego en una especie de tristeza. Esos novios denunciados en Facebook eran odiados con tanta pasión, detestados con tanta cercanía, que no podía dejar de envidiarlos. Se decía de ellos lo peor que se puede decir de un hombre, pero al menos se decía algo.

El olvido es para el macho el peor de los desprecios. La buena onda, las sonrisas, y los paseos a la playa con el tiempo se confunden. Muchos hombres pueden hacer felices a una mujer. Siempre lo harán de un modo parecido. Pocos tienen el privilegio de recibir su odio, de ser distinguidos entre los machos como el peor de todos.

Pocos hombres pueden obligar a una mujer a escribir un nombre odiado y buscar una foto y detallar los horrores en común. Esos hombres tiene el extraño privilegio de dejar su nombre impreso bajo la piel misma de las mujeres que no supieron amar. Es contra ese fantasma que los amantes olvidables, que los buenos chicos, luchamos. Generalmente estamos destinados a perder.

No hay comentarios.: