EL CRIMEN SIN PASION

¿ Que habrá pasado en la cabeza de José Mario Ruz la primera vez que disparo sobre un desconocido ?

¿ Habrá pensado en los millones que debía, habrá cruzado por su mente el rostro delgado, seco y terrible de la que le encargo el crimen ?

¿ Vio su propia vida, su infancia, sus robos, sus mujeres, todo lo que amo y odio y conoció, salpicado para siempre de una sangre ajena ?

¿ Se sintió como un dios que castiga sin conocer o como un pobre diablo que tiene que vender hasta su capacidad de matar para satisfacer a unos prestamistas ?

Matar por odio, matar por aburrimiento incluso, matar por matar, todo eso me parece terrible, pero podría llegar a comprenderlo. Diez o 20 veces al día quiero matar a alguien, no lo hago y espero no hacerlo nunca, pero lo comprendo. Pero ese otro asesinato, frió, planificado, como un trabajo en horas extraordinarias, me parece misterioso e incomprensible.

Entrar en una casa ajena, ver cuadros, olores, intimidades; dar un paso, otro, escuchar los ladridos de un perro y seguir. Rezar o maldecir buscando a alguien del que solo tienes una foto. Ser el verdugo , el mensajero, el ángel exterminador de un desconocido al veras solo una vez, debe ser una de las experiencias mas extrañas que existen. Como debe ser extraño cometer de pronto, por puro dinero, por puras deudas, por pura horrible frialdad. el crimen mas horrible de todos: el crimen sin pasión.